SHAPYPRO realiza estudios y evaluaciones clínicas de seguridad sobre cosméticos en el marco de los requisitos del Reglamento Europeo sobre Cosméticos CE 1223/2009 de 30 de noviembre de 2009 y el Reglamento Europeo UE 655/2013 de la Comisión, de 10 de julio de 2013, que establece los criterios comunes a los que deben responder, respectivamente, las reivindicaciones relativas a productos cosméticos.
¿Por qué realizar un test de seguridad in vivo?
Ensayos de eficacia validados o innovadores para respaldar sus afirmaciones cosméticas.
Cribado de ingredientes activos y caracterización de la eficacia de sus formulaciones cosméticas.
Servicio personalizado para requerimientos especiales en sus pruebas de eficacia o seguridad.
Tipos de tests de seguridad in vivo
- PRUEBA DE PARCHE (Prueba de compatibIlIdad cutánea):
- Propósito: Evaluar la compatibilidad cutánea y posibles reacciones alérgicas.
- Método: Se aplica una pequeña cantidad del producto cosmético a un parche, que luego se coloca sobre la piel (generalmente en la espalda). El parche permanece colocado durante 48 horas y se observa cualquier reacción cutánea.
- Uso: Identifica dermatitis de contacto o irritación de la piel causada por el producto.
- PRUEBA ABIERTA (Prueba de compatibilidad cutánea):
- Propósito: Similar a la prueba del parche, pero el producto se aplica directamente en un área pequeña de la piel (como la parte interna del antebrazo).
- Método: Se aplica el producto y se controla cualquier reacción cutánea.
- Uso: Evalúa reacciones cutáneas inmediatas.
- ROAT (Prueba de aplicación abierta repetida) (Prueba de compatibilidad cutánea):
- Propósito: Evaluar la irritación cutánea acumulada.
- Método: El producto se aplica repetidamente en una zona específica (normalmente el antebrazo) durante varias semanas.
- Uso: Determina si el uso prolongado provoca irritación de la piel.
- PRUEBA DE USO (Prueba de Aceptabilidad Cutánea):
- Propósito: Evaluar la aceptabilidad general de un producto cosmético durante su uso regular.
- Método: Los participantes usan el producto según lo previsto y se registra cualquier efecto adverso.
- Uso: Evalúa la seguridad y aceptabilidad en el mundo real.
- PRUEBA DE NO COMEDOGENICIDAD:
- Propósito: Determina si un producto causa comedones (puntos negros o puntos blancos).
- Método: Los participantes se aplican el producto en la cara y se evalúa la formación de comedones.
- Uso: Relevante para productos para el cuidado de la piel, especialmente aquellos etiquetados como no comedogénicos.
- PRUEBA CLÍNICA FINAL DE SEGURIDAD (TCFS):
- Finalidad: Evaluación integral de la seguridad del producto cosmético terminado.
- Método: Implica varias pruebas, incluida la compatibilidad cutánea, la irritación ocular y otras evaluaciones relevantes.
- Uso: Garantiza la seguridad general antes de su lanzamiento al mercado.
- PRUEBA DE SENSIBILIZACIÓN CUTÁNEA (Anteriormente HRIPT):
- Propósito: Identifica posibles alérgenos en un producto.
- Método: Se expone un grupo de voluntarios a la sustancia de prueba en condiciones controladas.
- Uso: Determina si el producto provoca reacciones alérgicas.
- FOTOIRRITACIÓN Y/O FOTOSENSIBILIZACIÓN:
- Propósito: Evalúa si un producto causa reacciones adversas cuando se expone a la luz solar o a la radiación UV.
- Método: Los voluntarios se exponen a la luz ultravioleta después de aplicar el producto.
- Uso: Relevante para protectores solares y otros productos expuestos al sol.
Si está interesado en evaluar la seguridad de tus productos, consúltenos sin compromiso.
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